La sobre protección y sus consecuencias

Todos nosotros conocemos personas sobre protegidas: esas personas que sienten que tienen derechos para lastimar a los otros, para abusar, para ser groseras, que no son capaces de sentir empatía por los demás.

Este tipo de personas que viven confiadas en que el otro va a aguantar lo que sea: cualquier tipo de maltrato.  En ocasiones ha sido una madre la que en su temor de dejar de ser querida o en su culpa por alguna circunstancia, le permite a ese hijo o hija traspasar todo límite y más allá: esa madre exige a los otros hijos que toleren los abusos del sobre protegido.

Las personas que han recibido ese trato permisivo se convierten en seres abusivos, indolentes, agresivos. Están enojados consigo mismos y con quién los ha sobre protegido porque de algún modo intuyen que algo no anda bien con ellos mismos.

El sufrimiento en el mundo se aumenta cuando no sabemos poner un alto a quién se cree con derecho de abusar de los otros. Poner un límite a las groserías de los demás cuesta mucho: ser exiliados de su cariño, sentir culpa, sentir miedo a perder su afecto, creer que no somos tan «buenos». No poner el límite cuesta más caro.

En esta ocasión no concluyo el tema, da para mucho y dedicaré varios artículos al mismo. Espero tus comentarios.

Publicado por Rocio Arocha

Dedico mi vida profesional al psicoanálisis individual y de pareja. Soy docente en las Maestrías en Psicoterapia General y de Niños y Adolescentes en la Asociación Psicoanálitica Mexicana y soy candidata a Doctora por la misma institución.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: